Por Tutti DuPlenty
En tan solo 3 años La Culpa han publicado tres discos. Una trayectoria vertiginosa que ha pasado por cambios de formación, varias giras, y una dedicación y entrega difíciles de encontrar en nuestros días. Su ética de trabajo y compromiso cuantificado en horas se materializan ahora en su nuevo LP “Clavos en el tiempo”, que verá la luz el próximo día 10 de septiembre, en el que La Culpa se replantean en formato trío y alumbran una suerte de nuevo comienzo.
“Clavos en el tiempo” está ya disponible en preventa, y dos de sus adelantos ya para escuchar en todas las plataformas.
Los tres habéis tenido (o tenéis en paralelo) otros proyectos musicales. ¿Cuál fue la diferencia que os propusisteis al empezar La Culpa?
Toni: Por mi parte realmente ninguna, surgió todo de manera muy espontánea. Estábamos por ahí de fiesta y dijimos: “Vamos a quedar un día para tocar, a ver qué sale”. El primer día quedamos nosotros tres, pero el siguiente ya vino Tania y empezamos a darle forma al grupo. No hubo un planteamiento previo. Luego sí que ha habido cosas distintas a otras bandas en las que he tocado, como por ejemplo lo de hoy: tocar en el Canela, o en festivales. Yo siempre he tocado en bandas más de punk, de crust y hardcore, en ese sentido sí que estoy viviendo experiencias diferentes. Pero todo eso ha venido después.
Néstor: Yo llevaba un tiempo tocando más o menos con las mismas personas, así que me gustó la propuesta por juntarme con otra gente a la que conocía únicamente de ver por ahí y poco más. No sabía por dónde podía salir el asunto.
Miki: Yo llevaba tocando más de 15 años. No han sido bandas trascendentales, pero un montón de ellas. Bandas de thrash metal, de progresivo, una de punk que éramos dos colegas que se llamaba Sangre de Mono, en Valencia tocamos un montón, luego Flipping Colors, MAR, MINIMA… con gente de Betunizer, Cuello, Zener, Podium…
Toni: Yo es la primera vez desde que toco que estoy en un solo grupo. Siempre he estado en varios grupos a la vez, pero es que muchas veces esos grupos es como “hoy se cancela el ensayo porque no sé quién no viene”. Y mi sensación era que necesitaba tener varios grupos para que por lo menos entre todos consiguiese llenar mis necesidades de tocar.
El nuevo disco, además de más complejo musicalmente, con cambios inesperados y melodías menos convencionales, tiene en lo lírico un carácter más sombrío que vuestros discos anteriores. He llegado a preguntarme si este disco es conceptual, porque menos la canción de “Y ya no estás” todas parecen compartir un mismo punto de vista.
Néstor: No sé si llegará a ser conceptual, aunque es verdad que prácticamente todo el disco habla de lo mismo, de estar atrapado en un bucle y dar por hecho que sólo puede ir a peor. Por otro lado tenía claro que no quería que todo eso sonase a reproches, sino más bien a una especie de angustia interna, a estar viviendo algo que no funciona, querer salir pero sentirse incapaz de escapar y romper con todo. “Y ya no estás” es una canción pidiendo perdón a una persona a la que sabes que has fallado, que lo hiciste mal, eso es nuevo para mí… Y luego hay un par de canciones que van sobre el principio y el final de una relación, pero sin toda la carga de la angustia que comentaba antes.
En el estribillo de “Lo vi mañana” dice “Clavos en el tiempo / siempre vuelve a suceder“, que es una idea que se repite de distintas maneras a lo largo del disco. ¿Qué es lo que vuelve a suceder?
Néstor: Habla de esos momentos en los que dices “venga va, que esto es sólo un desencuentro, tiramos palante que todo bien”, pero no, una y otra vez es la misma historia. Es lo que comentaba antes sobre estar en un bucle, ser consciente de que las cosas no van bien pero no poder salir de ahí.
¿Y esto te ha pasado alguna vez con letras que has hecho para Yorchh o Morenas o quién sea, que te salgan todas las letras del disco menos una sobre lo mismo?
Néstor: La verdad es que no. Lo que más me ha costado siempre es ponerme con las letras, así que lo dejo para el final. La Culpa hacemos primero la parte instrumental, dejándolo casi todo prácticamente cerrado, y luego, cuando ya tengo una idea de melodías y rítmica de voz, intento encajar letras. Nunca he desarrollado canciones a partir de una letra, siempre ha sido al revés.
¿Y qué son esos “Clavos en el tiempo”? Entiendo que está relacionado.
Néstor: Yo los entiendo como marcas de cosas que han sucedido a lo largo de tu vida, o en una historia particular. Sucesos trascendentales que se han quedado ahí, clavados, y que no los vas a poder quitar ni borrar.
También en relación a las letras hay una diferencia palpable entre este disco y los anteriores. En los dos primeros eran más abstractas, por momentos naif, mientras que en este disco parece haber llegado toda la gravedad de repente.
Toni: Las letras de primer disco las hicieron entre Tania y Néstor, y las del segundo entre Cohete y Néstor, supongo que eso ha influido en que haya diferencias en las letras de cada disco. Además creo que también la forma de cantar hace que suenen distintas, Néstor tiene una forma de cantar más tristona, más melancólica, que aún siendo una misma melodía da una sensación muy diferente.
Además de las letras, en “Clavos en el tiempo” hacéis cambios mucho más audaces y compases menos habituales. Antes eran canciones más pop, de estructura clásica. Mención especial para las guitarras de Miki, que en este sentido aportan un extra de complejidad. Son guitarras muy creativas, con arreglos que aportan profundidad.
Toni: Las guitarras en este disco tienen más desarrollo y le hemos dado más importancia a las dinámicas y arreglos.
Miki: Muchas veces cuando os pongo en el local una demo que he grabado en casa decís “hostia, el compás es raro, no marcas cuatro, marcas seis o siete u ocho”. En varias canciones, como la de “Plástico” o las dos del cajón, no hemos cambiado nada con respecto a las demos.
Toni: A lo mejor no se nota de primeras, pero como dice Miki, hay varias canciones que se salen del cuatro por cuatro. Por ejemplo en “Y ya no estás” hay una parte de la canción que es un cinco por cuatro, y luego los estribillos están en un seis por cuatro. De hecho hay varias en este disco de cinco por cuatro. Todo comprimido en minuto y medio.
Miki: Claro, pero eso es porque a mí me mola que la canción tenga mucho dinamismo, pero sin ser muy larga, porque las canciones largas por lo general me aburren, a no ser que seas una banda muy buena – no a nivel técnico, eso da igual, más a nivel composición, que te saque un poco del esquema, ¿sabes? Por lo general la mayoría de bandas de hoy en día me resultan bastante aburridas.
Si no te molan las bandas de ahora, ¿te inspiras en bandas de antes?
Miki: Sí, bueno, en lo que he mamado, pero sobre todo estoy más influenciado por mis amigos. De tocar, de Marcos Junquera (Betunizer, Alberto Montero, Daniel Johnston, etc), Nick Perry (Jackson Milicia, Cuello, Podium, Zener), Felipe Muñoz (música clásica), que a nivel composición siempre me han resultado muy peculiares, además de tener un estilo de tocar muy original. De las bandas que tenían ellos y de ir a sus conciertos cuando era muy crío. Me he empapado un montón.
Puro Valencia.
Toni: En Valencia hay una parte importante de vida común que gira alrededor de la música. Mucha gente tenemos grupos o nos movemos por espacios que giran en torno a la música. Ahora hay un montón de grupos de peña joven y además bastante chulos. Creo que también el tener un espacio como la Residencia hace mucho. Mirando las bandas de Valencia que estamos aquí en el Canela, todas tenemos vinculación con la Resi. Varias de las personas que están por aquí venían siendo muy jovenes y algunos de sus primeros conciertos los hicieron en La Residencia. Esto sigue pasando, y si tú ves a tus colegas tocando eso te influye. Por eso es importante que haya espacios que defendamos y protejamos. Esos espacios son cultura. Al final igual dentro de cinco años alguien que ha estado en ese concierto hace tu grupo favorito; alguien que se ha montado un grupo porque vio a no sé quién de Canadá tocando por 5 €, o yo qué sé. Y eso no se tiene que perder.
Sí, lo mismo pasaba en Galicia con el Liceo Mutante.
Toni: Una banda que no está generando dinero tiene difícil acceso a las salas. Hay mogollón de gente fuera de nuestro entorno que no tiene la suerte de tener a su alcance estos espacios, peña que a lo mejor lleva dos años tocando y no han podido hacer ningún concierto, como mucho un día que alquilan una sala.
Miki: Yo cuando empecé me pasaba eso. La suerte que tuve fue que conocí a Gema (Putilatex) que en ese momento montaba bolos en la Resi y nos contactó por MySpace para tocar Sangre de Mono. Al entrar allí, recuerdo quedarme flipando, y éramos niños. Dijimos hostia, aquí es donde está el centro neurálgico.
Toni: Y mola que haya sitios así en distintas ciudades, y que se cree circuito. Grupos que no necesiten generar dinero para poder tocar. La gente de Andalucía Überalles, Arrebato en Zaragoza, la peña de Don Benito… La movida es que para que estos espacios existan hace falta una gente que se lo curre, que le dedique su tiempo, y sin ganar dinero. Pero también el resto de gente tiene que proteger esos espacios, y esos espacios se protegen yendo, participando, ayudando, colaborando. Si no luego desaparecen y se echan mucho de menos.
¿Cómo vivisteis y cómo afectaron los cambios de formación de los dos primeros años de la banda?
Toni: Cuando hubo el cambio de Tania por Cohete estuvimos varios meses sin hacer conciertos. Y luego volvió a pasar lo mismo cuando se fue Cohete. Sí que es verdad que esa segunda vez pasó menos tiempo porque decidimos seguir los tres con Néstor cantando. En esos momentos de parón lo que hicimos fue centrarnos mucho en la parte instrumental. Gran parte del segundo disco, “Cuándo Amanece”, nos la curramos en uno de esos parones. Estuvimos buscando a alguien que pudiese encajar en la banda, que encajara con la dinámica, pero no aparecía. El ritmo del grupo es bastante alto, de ensayar mucho, tener los fines de semana libres para tocar…
Cuando dices ensayar mucho, ¿de cuántos ensayos a la semana hablamos?
Toni: Lo mínimo es un ensayo por semana. Eso siempre fijo. Pero por temporadas vamos más días, y luego cada uno va por su cuenta al local a practicar lo suyo.
Miki: Hacemos mínimo un ensayo general conjunto, y luego ensayos individuales. O sea, por ejemplo, Toni por las mañanas va a practicar las baterías, Néstor a practicar voces y lo que sea (efectos, etc). Y luego hacemos ensayo general un par de veces por semana.
Toni: Cuando estamos preparando un disco ha habido semanas que hemos quedado todos los días.
Néstor: No es una locura lo que ensayamos, pero somos constantes.
Toni: No solemos cancelar ensayos casi nunca. Después de un fin de semana que hemos tocado no decimos “la semana siguiente no vamos a ensayar”, si no que suele apetecernos más. Justo ahora hemos estado haciendo ensayos más cortos, pero cuando hemos estado componiendo si nos tenemos que pasar cuatro horas, nos las pasamos. Ahora estamos centrados en preparar la gira de presentación del disco nuevo, pero hemos estado componiendo también, hay ya un montón de demos para lo próximo. Con el cambio de voz también hemos dedicado bastante tiempo a dejar las canciones como las queremos.
Entonces, recapitulando: una de las maneras en la que los cambios de formación afectaron a la banda fue en la dilatación de los tiempos.
Toni: Sí que influyó en los tiempos a la hora de grabar o cerrar fechas para conciertos. Aún así nosotros no llegamos a parar en ningún momento y dijimos bueno, mira, vamos preguntando y nos centramos en la parte instrumental.
Miki: De hecho nos planteamos en algún momento dejarlo, porque se nos hizo un poco cuesta arriba; cuando lo dejó Tania, Néstor también planteó irse. Entonces Toni y yo estábamos pensando en plan de: “hostia, ¿lo dejamos o seguimos?”. Nos planteamos muchas posibilidades, dependiendo qué escenario se diese. Entonces claro, afloran muchos sentimientos. Había mucho agobio, sobre todo.
Toni: Pensamos si hacer otro proyecto, cambiar el nombre, esas cosas. Pero dijimos joder, llevamos un trabajo hecho, nos lo hemos currado bastante. Y decidimos seguir a ver qué tal.
Miki: Y yo hoy pienso que hicimos bien.
Toni: Lo habitual es que las bandas cambien de componentes. Por ritmos, porque de repente uno está más centrado en el curro, porque uno está más centrado con su pareja, porque alguien tiene un hijo, porque le sale otro trabajo…
Y más allá de esa ralentización y de esa búsqueda, ¿se ha derivado algún cambio artístico de esos cambios de formación y finalmente paso al formato trío?
Toni: Los cambios creo que se deben sobretodo a que llevamos más tiempo tocando juntos y que conocemos mejor los gustos de cada uno y las cosas que nos unen. Eso hace que a la hora de componer todo fluya con mucha facilidad.
Miki: Creo que nosotros tres estamos bastante alineados a nivel composición. Solemos estar de acuerdo entre nosotros.
Toni: También ayuda que con el tiempo hemos ido adquiriendo dinámicas de curro que hacen que todo avance como queremos. Nos gusta lo de prepararnos cosas cada uno y ponerlas en común en los ensayos. Por ejemplo, sacamos una canción y Néstor se pasa días dándole vueltas a la letra, haciendo no sé cuántas melodías. Luego trae todo eso al ensayo, y a partir de ahí lo vamos cerrando. Por otro lado Miki y yo compartimos piso, y vamos hablando en el día a día, en plan “¿y si pruebas a hacer esto o esto otro?”.
Entonces al fijar el formato trío todo ese tiempo y agilidad lo empleasteis en trabajar y desarrollar las canciones. Supongo que eso explica que “Clavos en el tiempo” tenga una profundidad y una complejidad que no se percibía en los anteriores.
Toni: Si, en parte es por el tiempo que le hemos dedicado y en parte, por lo que comentaba de la experiencia de llevar más tiempo tocando juntos.
Néstor: Yo tampoco toco muy allá, me falta técnica, pero en La Culpa normalmente intento tocar un poco por encima de mis posibilidades, cosas que de primeras no hubiese tocado en otros proyectos porque no me salen, y aquí me esfuerzo un poco más por aprender y mejorar, especialmente en este disco.
Ya lo habéis estado contestando, en realidad, pero lo pregunto igual: sois una banda extremadamente prolífica y actualmente estáis ya componiendo el que será vuestro cuarto disco. ¿Cómo es vuestra dinámica de trabajo?
Néstor: Tenemos dos métodos. Uno sucede cuando estamos en el local, alguien se pone a tocar cualquier cosa, se va uniendo el resto y acabamos cerrando una posible estructura para una canción. Y el otro, que en este último disco es lo que más ha pasado, es cuando Miki nos pasa demos que graba en casa. A veces cambian bastante, pero otras veces se quedan prácticamente tal cual están en la demo, cambiando algunos bajos y ritmos, además de añadir unas voces y letras, claro.
Toni: En los ensayos que hacemos los tres juntos no nos dedicamos a aprender la canción, ni a sacar lo que vamos a hacer en esa canción, eso lo llevamos ya hecho. A mí me mola más así. Y no lo había hecho con otros grupos antes, y ahora me parece básico.
Os debe de gustar mucho ensayar, para que ese sistema se sostenga tienes que disfrutarlo mucho.
Toni: De hecho, llegamos y directamente los tres nos enchufamos y ya estamos tocando. Y es que llegamos con el ansia de ponernos a tocar. A veces tenemos cosas que hablar y nos cuesta estarnos quietos.
Miki: A mí a veces me sabe un poco mal que en los ensayos voy un poco robot. Voy, me cuelgo la guitarra, no digo casi ni hola, toco y me voy. Pero porque tengo muchas cosas que hacer durante la semana, otros proyectos no relacionados con la música, y el grupo me gusta, pero es que me gustan muchas otras cosas y el tiempo es finito.
Toni: Más el trabajo que le dedicamos en casa, porque por ejemplo hay veces que tienes 25 audios de Néstor con pruebas de voz. “¿Oye, pero qué os parece si aquí no sé qué?”.
Néstor: Sí, yo hago bastante en casa. En parte porque si no lo hiciera no me saldría guay, ¿sabes? Necesito probar un poco y oírlo grabado para ver qué tal.
Da la sensación de que “Clavos en el tiempo” es una especie de nuevo comienzo, en el sentido que es muy diferente a los trabajos previos. Parece que tengáis más las riendas de hacia dónde queréis ir, que sois más dueños del volante. ¿Hacia dónde queréis dirigir a La Culpa a partir de aquí?
Toni: Yo creo que ahora tenemos más recursos también. Ya llevamos más tiempo tocando juntos, y también tocando este género, porque algunos veníamos de tocar cosas bastante diferentes. Creo que podemos elegir más, con más facilidad. Podemos proponernos probar esto o aquello.
Néstor: Aún no lo hemos hablado, la verdad. Hablar, en plan: “¿cómo vamos a enfocar el siguiente disco?”. No hemos tenido esa conversación.
Toni: Aunque si que tenemos varias ideas y y demos para el próximo disco, aún no nos hemos puesto realmente a componerlo, esa conversación saldrá más cuando empecemos a concretarlo. Ahora mismo estamos centrados en preparar la gira de presentación del disco.
Vale, voy a hacer una pregunta ligera para acabar: ¿qué veníais escuchando en el coche de camino aquí?
Miki: Néstor puso una lista que tengo de cosas que me gustan, y luego pusimos la lista del Canela para descubrir un poco lo que había y tal. ¡Ah! Y Cursive, una banda que hace poco descubrí que es mítica, pero yo no la conocía. Un disco en concreto que me ha gustado mucho es el “Domestica”, me recuerda un poco entre Fugazi y At The Drive In. Tiene un rollo así muy bonito y con sonidos muy claros.
Toni: Y nos pusimos bandas que nos gustan y vamos a ver esta semana en el festi, Protomartyr, Metz, Crack Cloud…
Miki: Y luego las frikadas que me gustan a mí. Que bueno, a ellos igual no les molan mucho. Como Tricot o Ichika Nito.