Adiós 2022
Empezamos el año muy fuerte con un Humo Fest en Valencia del que puede que aún haya gente recuperándose. En febrero salió Ultramonte, sexto elepé de Pablo Und Destruktion, disco potente y rotundo repleto de temas memorables como Lobito, que contó con un vídeo a los mandos de Álex Galán con caballos, antochas y mascarillas ardiendo. Unos días después salía ‘Lance’, primera parte del EP de debut de Santa Companha, post-punk melancólico y etéreo de muchos quilates. Apenas dos semanas después veía la luz ‘Abysmos‘, nuevo elepé de los sevillanos Pylar explorando los límites del metal, cargado de percusiones atávicas, cánticos en idiomas desconocidos y guitarras de las que hacen que se muevan los amplis.
También en marzo escuchamos el primer adelanto del nuevo elepé de Mausoleo, y nos hipnotizó el videoclip de ‘Alleraná’ de Viuda, rodado por Samuel Fonseca y Guillermo Kult en unas minas de carbón con un vestuario diseñado a medida y para la ocasión. Y solo un día después salió el álbum homónimo de debut de La Culpa, llegados para arrasar y triturar corazones con sus melodías pop. Apenas diez días después presentábamos el EP de Vialdela ‘El Color’, un trabajo de piano y cuerdas cercano al neoclásico y la música new age que transmite serenidad, profundidad y honestidad a chorros. Unos días después salía ‘Sur’, de Otro, una colección de 27 temas que sortean todos los estilos mezclando ambient, chillout, cloud-rap, rock, soul, metal y quién sabe cuántas cosas más.
No habían pasado dos semanas de eso y ya estábamos presentando ‘Esto me pertenece’, nuevo EP de Dame Area coeditado junto a B.F.E., en la perfecta intersección entre el EBM latino, techno-punk y tribal wave. Y antes de que acabase el mes Cruhda presentaba ‘Pájaros’, adelanto de su segundo elepé, un tema onírico y oscuro con videoclip de Judith Adataberna. Finalmente pusimos punto y final al primer cuatrimestre del año con un tremebundo Humo Fest en la Upload de Barcelona con una sala abarrotada desde el minuto uno de gente cantando todos los temas en los ocho conciertos. En fin, todo esto y no habían pasado aún ni los primeros cuatro meses del año.
Y así llegamos al verano. En junio y julio salieron los adelantos del nuevo elepé de La URSS ‘Más allá del futuro‘ y ‘Euforia‘, que se sumaron a ‘Armonía‘, todos ellos con unos videoclips increíbles de Derek Van Der Bulcke, y unos temazos de cantar llorando muy fuerte. También en junio salió el primer videoclip de La Culpa, un homenaje al cine slasher dirigido por Adrià lucas y Amberes Films. Al poco salió ‘Verte ser’, nuevo adelanto y videoclip de Mausoleo dirigido por Duelo y con Elvira y Mateo de Santa Companha corriendo por campos de trigo. La traca de videoclips del verano se cerró con ‘No lo sé’, nuevo single de Sofia cercano al kraut y a los sonidos de Plantasia y demás exploraciones pop y progresivas de sintetizadores de los 70, con un videoclip absolutamente supremo de Alejandra Núñez en el que Sofia y cuatro amigas hacen lo que les da la gana. En agosto celebramos bajo la lluvia (el primero de los dos días) un Humo Fest en el hospital abandonado de Oviedo.
Lo de septiembre hace poco y aún os acordáis: salieron nueve ediciones en Humo, nueve, cada cual más bestia que la anterior. Del elepé de La URSS, ‘+’, qué se puede decir. ¿Que quizás sea el disco más apasionante que ha salido en España en muchos años? Desde luego en esta casa nos lo parece. Es una auténtica salvajada, más post-punk de lo que nunca se ha puesto La URSS, más profundo y más complejo, y sobre todo con más temazos de los que un solo disco puede contener. Santa Companha presentaron la segunda parte de su EP, completando así ‘Lance De Honor‘, ocho temas de autenticidad y pureza envueltos en sonido acuático y nostálgico. El siguiente pepinazo fue el álbum de Mausoleo, ‘Refugio Transitorio’, esperadísimo, acompañado de una gira épica de más de un mes por todo el estado. ‘Refugio Transitorio’ está llamado a ser un disco de los que permanezcan, que sobreviva al frenesí de lanzamientos de nuestros días, aquí queda esta profecía por escrito.
El siguiente elepé que salió en este septiembre trepidante fue el apabullante ‘Apolo’, tercer largo de Igor: stravaganzza a lo Carpenter, Mark Mothersbaug o Giorgo Moroder, un disco dirigido a los oídos más exquisitos. Igual que el single de presentación del nuevo proyecto en solitario del ex-Fasenuova Ernesto Avelino: Cachito Turulo, ‘Omayomi’, producido por Gonzalo Sanz y Guillermo Rojo de Somos La Herencia. El esperadísimo segundo largo de Cruhda, ‘Lux Ahena‘, ahondó en la oscuridad electrónica y experimental de Paula Tweaker, ahora afincada en Berlín. Un disco de mucho, mucho peso, cuyo segundo videoclip ‘Lux Ahena’ fue rodado bajo las frías aguas del Atlántico bajo la dirección de nuevo de Judith Adataberna. También intenso es el EP ‘Espacio de Dolor’ del trío barcelonés Plataforma, banda de culto con apenas un puñado de temas en la calle.
En los últimos meses del año Viuda publicaron un nuevo tema, ‘Costumbrismo‘, y el álbum de Balcanes ‘Gloria Eterna’ llegó convirtiéndose le pese a quien le pese en uno de los mejores discos del año. En octubre abrimos las puertas de los cuarteles generales de Humo y acabamos con un concierto épico de La URSS en La Salvaje, y Somos La Herencia publicaron una revisión de ‘Parque de Atenas’ con un featuring de Cachito Turulo con un videoclip muy guay. Y para poner la guinda al asunto habrá un último Humo Fest, de nuevo en Oviedo, el 23 de diciembre con entradas ya a la venta.
Los dos adelantos del elepé de Ela Rea en estas últimas semanas del año abren la puerta a un 2023 en el que, como no podría ser de otra manera, Humo Internacional va a redoblar sus apuestas y va con todo.
Pueden empezar el año con la tranquilidad de saber que Humo no les abandonará.