Primera pregunta, súper facilita: ¿Qué tal ha ido la gira por Estados Unidos?
Pablo: Ha ido muy bien. Mucha diversión, muchos kilómetros y poco descanso.
Maïk: Yo hubo un día que dormí en una bola.
¿Una bola?
Maïk: Sí, una bola enorme, como una especie de puff gigante.
Áfrico: Es que claro, al final la gente hace lo que puede. Ten en cuenta que vamos ahí seis húngaros, y claro, hay veces que la gente tiene un sofá-cama, una cama supletoria y luego ya una bola.
Maïk: Yo pillé muchos sleep skills en la gira.
Áfrico: Respecto a lo demás, no sabes lo que te vas a encontrar. Esta vez hemos tenido suerte. Por ejemplo, no ha habido, como en otras ocasiones, problemas para entrar en la frontera. Los conciertos, incluso los sitios que pintaban peor, tipo, yo qué sé, Cleveland un miércoles, estuvieron bien.
Pablo: También hubo ciudades que no nos habían ido tan bien en el pasado, como Baltimore, que esta vez coincidía en lunes. Esta vez fuimos fuimos en plan “aquí no va a venir ni Perry” y estaba petado.
Maïk: Y Chicago, Nueva York y eso que tenemos ahí los colegas de siempre, eso ya fue apoteósico.
Mhm. ¿Y tú Jorge, tienes alguna valoración sobre la gira?
Jorge: Yo me llevé muy buena sensación porque teníamos conductora que yo pensaba que se iba a agobiar un montón…
Pablo: ¡Sissi! ¡Un besito para Sissi!
Jorge: … pero hicimos súper buenas migas con ella, y entendió perfectamente nuestro humor desde el primer momento.
Sin duda todas nuestras bendiciones y nuestros corazones para ella. Esta ha sido vuestra 5.ª gira por Estados Unidos. ¿Habéis notado el país cambiado?
Maïk: A mí me ha sorprendido que antes nos preguntaban “¿sois una banda?”, y ahora nos preguntaban “¿sois europeos?”
Áfrico: Fuimos allí pensando que habría cambios evidentes, pero la verdad que a nivel manifiesto no parecía que los hubiese, sin embargo, como dice Miguel, lo de “europeos” – “no europeos” muestra un nuevo escenario. Por otro lado, nuestros amigos de Chicago, que son de de la Villita, Little Village, que es la zona latina, nos estuvieron explicando que hubo una oleada de redadas.
¿Por la política migratoria?
Maïk: Sí, la Villita es un barrio latino en el que mucha gente no tiene papeles. Metieron ahí miedo haciendo muchas redadas, controles “aleatorios”, entre comillas, básicamente parando a gente morena.
Sí vaya, lo que hacen en Lavapiés.
Pablo: Creo que ni siquiera era legal hacer deportaciones, pero se dedicaron a meter un poco de miedo. Por otro lado en otros sitios, en Nueva York por ejemplo, la peña estaba desconcertada.
Maïk: Sí, por cosas como como “ayer un bote de pintura me costaba 150 $, la semana pasada costaba 260 $, y mañana sabe dios”. La peña está un poco en plan “Ya nada tiene sentido. Nunca más. Todo está loquísimo”. También en nuestro ambiente mucha gente vino a pedirme perdón por Trump. A mí me pasó varias veces. En plan “perdonadnos por el presidente que tenemos”.
Jorge: También, por decir algo positivo, se está tomando algunas medidas con respecto al tema del fentanilo. En todos los bares en los baños tienen kits para testear la droga.
Maïk: Sí, aunque la experiencia de usuario no es tan fluida como podría, porque lo que querrías es un bastoncito que pudieras testear la droga directamente, no que tuvieras que montarte un puto laboratorio de Breaking Bad.
Solo una cosa antes de pasar a la siguiente pregunta: ¿lo de europeos os lo decían en plan a ver si erais latinos, en plan migrantes?
Áfrico: Yo creo que se refiere a que esa oposición está justo en el momento álgido, ese rollo de “Europa son unos gorrones”. De hecho tenemos una camiseta que hicimos por la canción “Euroorden” que es como la bandera europea con un glitcheo, y hubo un momento que nos cogieron y nos preguntaron con cara rara “¿eso es la bandera de la Unión Europea?” Y es que el cazador de Pennsylvania con el que te cruzas en una gasolinera quizás esté pensando: “¿De qué forma va a aprovecharse de mi país?”
Y bueno, en la medida en que entras al país mintiendo y que todo lo que sacas es en negro, razón no le falta [Risas]
¿Cómo diríais que os ha sentado como banda esta gira por Estados Unidos?
Pablo: Bueno, ¡ha sido la gira donde menos nos hemos peleado de todas!
Jorge: También ha sido la más corta. [Risas]
Maïk: Por cierto, una cosa que acabará llegando a España, que se ha puesto de moda allí, que hay una especie de tribu urbana de gente que va en motos de motocross por la ciudad. En plan subiéndose por las aceras, haciendo el caballito, esquivando a la policía, pero como cinco o seis notas a la vez. Nos contaron que lo empezaron puertorriqueños y se había extendido.
Áfrico: Próximamente en Oviedo.
Bueno, aquí yo diría que el delay es de unos 10 años, igual ahora un poco menos.
Pablo: Pues sí, porque el egg punk se puso allí de moda en el 2018 y está ahora de moda aquí.
Maïk: Bueno pues eso: que si queréis ir de pioneros iros comprando una moto de cross, que es lo que viene.
Lleváis casi 20 años tocando juntos. ¿En qué punto de vuestra trayectoria como banda estáis ahora mismo?
Pablo: Estamos en nuestro mejor momento. [Gran jolgorio]
Maïk: Estamos ahora mismo empezando a obtener beneficios, ahora es cuando los ingresos pasivos están dando sus frutos.
Pablo: Como siempre, es lo de la distancia, que es el problema de la URSS. Yo creo que estamos en un buen momento, lo que pasa es que es muy complicado porque claro, pasan los años y las putas vidas adultas de cada uno son un problema para poder quedar los cuatro
Áfrico: Estamos haciendo canciones que están guay, tenemos como cuatro o cinco ya. Sí que es vierto que, a lo mejor, nosotros tenemos una pretensión de que los discos sean muy innovadores y al final, como dice Pablo, si ensayamos poco, musicalmente tampoco podemos hacer virguerías, pero sí hacer cosas que no hayamos hecho, no repetir las mismas y llegar a algo interesante.
A nivel de concepto y eso también avanzamos: estamos tirando del hilo de las cosas que vamos hablando y mirando a ver a dónde llevan. Hay cosas que nos motivan, lo que y aunque la la logística nos empuje a decir es muy difícil seguir haciendo esto, todo lo que no es logística: la amistad, las ideas o la música, nos motivan y todavía tenemos curiosidad por ello.
Vale, entonces como banda estáis en vuestro mejor momento. Y si volvemos atrás 19 años cuando empezasteis la banda, ¿cómo os imaginábais dentro de 20 años? ¿En qué se parece y en qué se diferencia a lo que es la URSS ahora mismo?
Jorge: Yo la verdad es que si me dices cuando empezamos que vamos a durar 20 años, no te lo compro.
Pablo: No, yo tampoco. Estuvimos a punto de separarnos una vez ya en 2010, cuando yo me fui a Madrid. Fue en plan bueno, primera gira europea, primera gira americana… La primera gira europea vino una persona que hizo que fuese bastante desagradable, y después cuando nos fuimos a Estados Unidos y México, vimos que nos llevábamos bien entre nosotros, en plan seguimos, vale.
Maïk: Yo creo que en general ha superado las expectativas. Además hemos reservado el grupo a un ámbito muy romántico. Es decir, nosotros seguimos queriendo hacer lo que hacíamos con 18 años, que es no tocar en festivales patrocinados, no hacer una especie de reconversión en un grupo que de pronto pueda petarlo, sino mantenerlo bastante puro. Pues lo hemos superado; hemos hecho cosas que ya no se hacen, cómo giras DIY por Estados Unidos y por Europa. Es que si te dicen “vete a Estados Unidos que vas a tocar en un pedazo de festival y te haces dos fechas alrededor, loco”, al final lo que estás haciendo es tocar a las 16:00 de la tarde en un megafestival de mierda. Para qué, si puedes estar yendo por el Midwest viendo un pueblo de Amish donde te miran mal, que es lo guapo. [Risas]
Áfrico: Lo que a mí me sorprende es que en 2006, 2007 estábamos súper flipados con el punk ochentero y demás, en un momento en el que la mayoría de la gente escuchaba otras cosas, movidas tipo streetpunk y tal. Y lo que yo no podía imaginar es que la música en general, bueno la escena underground, pegaría un viraje gordo en esa dirección, que el sonido que a nosotros nos gustaba, y que era “raro”, se iba a establecer como base.
Es decir, la inspiración pasó a ser no el punk 90s, sino el punk 80s, y de ahí ya el post-punk y etc. Y creo que por un lado si yo me hubiese visto a mí mismo en el presente hubiese pensado “illo, eres un indie repugnante”, pero por otro me gusta no habernos quedado en aquello, porque joder, tú imagínate 20 años no habiendo traicionado ciertas cosas que en ese momento tú veías como intocables. Creo que lo que nos hace interesantes es haber complejizado ciertas fórmulas que en ese momento eran muy bien sabidas. Ahora como grupo La URSS es mejor, creo, porque se parece menos a otras cosas, es más rara. Y yo creo que eso a la larga es positivo.
Pablo: Cuando empezamos reivindicábamos mucho el punk español de los 80, y sobre todo las producciones rarísimas que hacían, Y claro cuando peña de la música nos preguntaba ¿a vosotros que os gusta? Y respondíamos “KGB, “Parálisis” o Eskorbuto” poco más que se reían, en plan vaya bichos raros. ¿Y 20 años después me vas a decir que hay grupos que viven imitando esos sonidos y reivindicándolos? Digo hostia tío, si al final lo de la punta de lanza va a ser verdad.
Áfrico: Es muy raro. Es que tú te pones ahora a ver, por ejemplo, yo qué sé, vídeos de la guerra de Ucrania y Rusia de un dron tirando granadas sobre las trincheras y de fondo suena coldwave. Quiero decir que es raro cómo se han popularizado músicas que en ese momento parecían súper minoritarias.
Hablemos ahora del presente. ¿Cómo va el nuevo disco?
Pablo: Pues mira, tenemos dos canciones acabadas completamente.
Jorge: Tenemos cinco proyectos, quizá tres de ellas más avanzadas. En febrero tenemos que tener el disco entero compuesto.
Pablo: De hecho está pillada ya fecha para grabar en La Mina.
Jorge: Lo bueno de nuestras circunstancias es que no tenemos exigencias a la hora de decidir cuándo sacar el discos. Somos como una especie de iguana, que son capaces de ralentizar su metabolismo.
No sabía eso de las iguanas.
Jorge: Sí sí, son capaces de parar el corazón. Y ese es el secreto de la longevidad de nuestro grupo.
Pablo: Pero bueno, que estaría bonito que el año que viene para el 20 aniversario de la URSS saliese el nuevo disco.
De hecho en estos 20 años nunca parasteis del todo.
Pablo: No, no.
Áfrico: Yo creo que a veces la lucha, al menos mía, personal, que me une al grupo, es una lucha que tiene que ver conmigo y mi rutina. O sea, el grupo al final es un espacio de creatividad, un espacio de tu día y tu rutina espacios donde no estás, yo qué sé, trabajando o mirando el móvil.
Hay momentos que yo noto que estoy muy cerrado y odio eso, que igual te pasas tres semanas en blanco, pero si se lucha hay momentos donde la mente se pone a trabajar inconscientemente en eso, relacionando cosas o mirando las cosas con otros ojos. Es en esos momentos cuando igual estás en la ducha y te tienes que salir para grabar una idea con el móvil antes de que se te olvide. De hecho, hay momentos de mucha aceleración. En ‘Nuevo Testamento’ tres de las canciones que quedaron más guays, ‘Cristal’, la de la Cruz y otra más se compusieron en una sola tarde porque estábamos inspirados y fue pam, pam, pam.
Pablo: La canción ‘Gritos’, por ejemplo, se grabó con el móvil y luego en el local intentamos buscarle partes. Así es como ha funcionado.
Pero bueno, en respuesta a la pregunta: que nos hemos puesto una fecha de grabar tanto por los trabajos de cada uno y demás, como sobre todo para que no se eternice. Es que tío, el último disco se grabó en 2021, ha pasado mucho tiempo ya.
Vuestro último disco es buenísimo. Y en mi opinión, la mía, no obtuvo el reconocimiento que merece. ¿Por qué creéis que pasa esto?
Jorge: Yo diría que es raro que un disco tenga éxito en función de una cuestión meritoria, de su calidad. Al final es como cualquier producto: si tienes una serie de herramientas para promocionarlo, moverlo… Al final la peña no consume lo que tiene más calidad, sino lo que le llega.
Pablo: Lo increíble de todo esto es que, a pesar de todo, todo el mundo nos conoce.
Áfrico: Yo creo que pasó un poco ese cambio y eso es algo que tu no lo puedes controlar. Tampoco puedes pretender controlar lo que le gusta a la gente. Creo que en el sonido que se impuso, un sonido también post-punk pero diferente, hay un componente de electrónica que es parte del gusto general de la gente y determina mucho. No digo ni mejor ni peor, pero creo que hace que muchos grupos generen un sonido que la gente ve más actual que nosotros y sumado también a que creo que somos un grupo que no busca que nuestros conceptos sean fáciles.
Pablo: A mí por finalizar, creo que no hemos llegado nunca a tener ese reconocimiento. Ahora yo que estoy trabajando más dentro de la industria de la música, allí donde voy todo el mundo me pregunta ¿y la URSS qué estáis haciendo? El otro día tocaron unas chavalas súper jóvenes de Madrid que se llaman Las Dianas, que hablan algo de un pogo en un concierto de la URSS, y es en plan, al final todo el puto mundo nos conoce por aquí, pero aquí nadie viene a vernos después. [Risas]
Jorge: El día que digamos de dejarlo y digamos venga, pues vamos a hacer los últimos conciertos, ahí seguro que viene la peña y se pone las pilas. Pero la URSS al final es algo como que está ahí de fondo y durante el paso del tiempo la gente sabe como que lo tiene a mano, lo ven como parte del decorado.
Pablo: El otro día en Nueva York había una generación joven que también iban a ver al grupo con el que tocamos, y claro, esos jóvenes a nosotros no nos conocían, conocían a la banda de ahí del momento y Sam me decía, “tío, yo os veía tocar y decía, ¿por qué no ven la maravilla que yo veo?” Y le digo “ya, en España nos pasa un poco lo mismo” y decía “bueno, quizás cuando estéis muertos”.
Ayer, mientras estabais tocando, que estaba yo en el puesto de merch, salvo un par de señoras, casi toda la peña que vino eran como chavales de 18 años.
Pablo: Había muchos chavales jóvenes ayer.
Un apunte antes de pasar a la siguiente pregunta, yo creo que también os penalizó que justo después de la pandemia chaparon mogollón de okupas y de salas pequeñas y vosotros erais muy de girar por okupas y por salas pequeñas y eso yo creo que también penalizó ese disco. Es algo que he pensado varias veces. Entonces, dicho todo esto, ¿estáis dispuestos a hacer concesiones con vuestro nuevo disco?
Áfrico: ¿De tocar en sitios como por ejemplo, que no pensásemos tocar?
De lo que sea.
Maïk: Con fondos buitre… [Risas] Es que claro, o sea, nuestro grupo no es una lucha porque más gente lo escuche ni nada, es una lucha contra nosotros mismos. Entonces ahora nuestra lucha es ¿qué se puede aportar en ese ámbito? Que al final es muy de Áfrico, de decir ¿ahora cómo cojo toda esta realidad que está pasando y cojo conceptos que puedan ser interesantes para nosotros mismos y cómo lo expando en una canción y que a nosotros nos guste? Entonces, si alguien lo pilla, lo pillará, pero claro, si ahora tú te vas a poner a dar cuatro consignas de lo que está pasando ahora, como grupo, no nos aporta nada, entonces, en ese sentido no vamos a hacer concesiones y decir vamos a simplificar nuestro discurso. No, vamos a complejizarnos más hasta que no lo entienda ya casi nadie. [Risas]
Jorge: Tampoco creo que nosotros le hayamos rendido cuentas a lo que se supone que debieras hacer en determinados momentos. Al final somos unos putos frikis de esto y como que cuando esta gente, por ejemplo, me dicen que hay que tocar tal canción porque es la que más oídas tiene en Spotify, pues a mí la verdad es que me la trae al pairo.
Pablo: Pero eso no puede ser tampoco. [Risas]
Jorge: Pero yo te estoy hablando de mi manera de entenderlo, ¿sabes? Entonces realmente me debo a mí mismo y me debo a lo que a mí me gusta y ya está.
Áfrico: A mí lo que pasa es que yo soy una persona muy pop.
Tu eres muy pop sí.
Áfrico: Yo soy muy pop, en un sentido amplio. A mí me gustan canciones que tienen una cosa melódica, muchas veces ligada a la voz y entonces a veces las canciones que me gustan de mi grupo resulta que son también algunas de las que a mucha gente le entran también. En ese sentido soy más simple a lo mejor que Jorge. Entonces yo ahí, si hablamos de concesión, si que a lo mejor digo “illo, tener una canción que tenga una melodía muy pegadiza no lo veo un problema”, pero como hemos hablado antes, el grupo al final es un espacio de nuestra vida ya como personas, para volvernos o intentar ser más inteligentes, pensar cosas que no hemos pensado… Una cosa al margen de la vida cotidiana… Entonces es que yo lo veo un poco así, y lo hemos pensado mucho y decir, “illo, ¿cambiamos la movida?” Y a veces me veo como si fuésemos estos directores de cine tipo que están metidos en una peli que dices ¿Quién coño ve esta peli? Pero es interesante, a lo mejor porque dices, ha desarrollado un concepto y ahí está con su movida a ver a qué le lleva, que es más artístico en verdad.
Jorge: Pero también ya fuera de un nivel de letras y tal nosotros siempre tenemos como una estructura, hemos sido muy metódicos a la hora de componer. De hecho, voy a hablar un poco de las tablas de la ley para que veas un poco como funcionamos nosotros, con perdón de la URSS pero voy a hablar. Mira, todos los discos, nosotros, había determinados ingredientes que queríamos echar en el puchero, ¿sabes? Entonces era como, tiene que tener un componente de esto, tiene que tener un componente de esto otro.
Hacíamos como un cuadrante, como si fuera de Excel y era como vale, ¿Qué canciones tenemos hasta la fecha? Vale, tenemos esta y esta, vale. ¿Qué necesitamos para que el guiso esté listo? Vale, pues nos hace falta una que sea más pop, o nos hace falta una que sea más sentimental y al final te das cuenta de que si analizas los tres últimos discos. El nuevo ya lo hicimos de otra manera. Es el mismo disco todo el rato, pero como evolucionado todas las canciones, tienen como sus hermanas mayores y sus hermanas menores, canciones que se derivan de otras. Me puedo poner canción por canción y te digo de dónde viene cada una.
Lo que pasó es que llegó un punto en que sentíamos que coño, estamos haciendo lo mismo y a mí lo que sí que me interesa es, por ejemplo, romper las estructuras clásicas que hacíamos, que era como vale, la intro, la estrofa, el estribillo, la estrofa, el estribillo, punteillo y estribillo, todas las putas canciones son iguales. Entonces me interesaba más como decir ¿por qué coño tiene que llevar el estribillo una canción?, ¿Sabes? Es una herencia de los Beatles, ¿Pero quién coño ha dicho que una canción tiene que volver a una parte? Entonces es una movida súper anticomercial porque con lo que la peña se va a quedar es con algo que sepas cuándo te va a entrar, como que sea predecible, pero por otro lado dices, cómo te debes un poco a ti mismo pues voy a hacerlo raro. O sea, no tiene por qué ser siempre igual un puto tema. Aunque bueno, yo personalmente estoy más en ese rollo de construir nuestra manera de componer…
Pablo: Pero intuitivamente después lo ordenamos un poquito para que quede bien.
Vale. Ya solo quedan tres preguntas. Las ambiciones de la URSS, en cierto sentido han permanecido a lo largo de todos estos años. Pero también, en cierto sentido, han cambiado. ¿Cuáles son vuestras ambiciones ahora mismo?
Maïk: Nosotros somos un grupo ambicioso.
Pablo: A ver, a mi ambición… Tener un puto local, porque nunca hemos tenido un local de ensayo nuestro. Esa es mi ambición. Y poder guardar las cosas en un sitio [Risas]
Áfrico: A ver, yo la verdad que una de las cosas no sé bien cómo y al final también soy bastante contradictorio en este sentido, porque si me diesen un altavoz y me dijesen, Áfrico sal por la tele a dar las campanadas y a decir lo que tú quieras, a mí me achantaría un poco. Pero una de las cosas que sí que es una ambición, es que a veces siento que nos hemos currado mucho todo un universo de conceptos y me gustaría tener otras plataformas en el que a veces sentir que no cae en saco roto.
Algo que da un poco de pena es que vivimos también en épocas en las que había muchos grupos diciendo muchas cosas, haciendo muchas cosas, una época súper guapa. Por ejemplo, yo he vivido esa época en Barcelona del 2010, que había decenas de grupos ahí, la gente ocupando casas, haciendo de todo y de aquello ha perdurado poco. Perdurara, en nuestra memoria, pero la gente nueva que venga no iba a recordar mucho a los grupos porque no hay como muchos registros ni tampoco hay plataformas en las que cuenten la historia de todo esto. Una ambición sería, no sé bien de qué modo, hacer que cuando el grupo ya se separe haya contenido en el que se pueda decir, hostia tío, más allá de una interpretación y tal, podemos acceder a ver qué es lo que esta gente decía, ¿no? Entonces es un poco como ese rollo humano de decir quiero expandirme…
Maïk: Nuestra ambición ha sido perdurar y transmitir.
Jorge: Y sobre todo ir viendo como las bandas se forman y caen a nuestro alrededor y nosotros seguir como un viejo árbol sobreviviendo a la embestida…
Pablo: De nuestra generación somos de los últimos que quedamos..
Jorge: Y bueno, también me interesa hacer lo hecho, aunque nos vayamos haciendo mayores, pero evitando totalmente el paconerismo. Me motiva bastante sentir que aunque seamos puretas no somos pacones.
Pablo: Ni “lo guitarro” [Risas]
Áfrico: A nivel musical la verdad que sí que eso era como una ambición, al menos mía, pero era decir, me hubiese gustado mucho que si hubiésemos sido un grupo que ensaya mas y todo esto haber intentado dar con una fórmula que le diese poquito una vuelta de tuerca. Tú dices “illo, el punk que hacemos se basa mucho en lo que se ha hecho toda la vida”, pero sin embargo, hostia, estaría guay ya que somos un grupo que lleva toda la vida ser también un poco, no te voy a decir quién va con el machete abriendo camino por la selva, pero explorar algo y decir mira aquí esto se puede hacer. El problema es que a veces ese intento en la distancia es muy chungo.
Vamos con las dos últimas. Para decir algo de la corporación. ¿En qué punto está la corporación?
Áfrico: El otro día la corporación volvió a inaugurar el blog con excelente crítica.
Maïk: El logotipo de la corporación es magnífico. Está sobreviviendo al paso del tiempo, de eso no se habla.
Jorge: La corporación otro día habló en el blog, y escúchame, pese a lo naif que pueda resultar este rollo, quillo, la corporación va a vivir mientras la URSS esté viva y la URSS está ahora mismo, lo hemos dicho, en el mejor momento. La corporación lo único que pasa es que no le gusta tampoco dar mucho por saco, entonces ha estado un poco observando y ahora pues ha hecho una analítica pues muy fina de las cosas y si la cosa continúa un poquito pues seguirá haciendo.
Pablo: De vez en cuando sacamos una cinta de cassette.
Áfrico: Con la Corporación sacamos el disco del COVID, que fue el disco más difícil de conseguir, más exclusivo de la URSS. La colaboración con las instituciones de salud…
Maïk: Desinfectaron el single.
Además habría que decir que ya que has introducido todo el concepto de las tablas de la ley, hay otro concepto que también quiero que quede constancia para que no se pierda en el tiempo, que es el de DIY Extravaganza. Eso es muy de la corporación.
Pablo: De repente llegas a un concierto de la URSS y tienen mecheros a la venta.
Maïk: Eso es muy de la corporación. DIY Extravaganza es como la posibilidad del lujo en el DIY a nivel bajo. Es decir, por ejemplo, queremos, suministro ilimitado de cerveza Steinburg. Eso es DIY Extravaganza, como poder disfrutar de algo low cost, sabes, el lujo expresado en cantidad pero no en calidad.
Áfrico: Ser Pacón en verdad, un poco. [Risas]
Maïk: No, no, como, queremos algo de bajo nivel, pero mucho tiempo.
Jorge: Muy grande.
Maïk: Mucho tiempo y mucho, muy grande. [Risas]
Jorge: Espero que hayamos respondido a tu pregunta.
Por último, pregunta facilísima para cerrar la entrevista. ¿Qué bandas actuales del Estado nos recomendáis?
Jorge: Todo el catálogo de humo tiene excelentes referencias.
Pablo: A mí, por ejemplo, de esta gente de Sevilla, me gusta el grupo Eva, Somos la herencia.
Áfrico: Iannis Anisakis.
Jorge: Tatxers están guays.
Maïk: Sistema de entretenimiento. Son un poco como nosotros, pero han sido más listos y han cambiado el nombre y han hecho una fórmula más refrescante.
Jorge: Pero es que nosotros nos ponemos Sistema de diversión y no nos va bien. [Risas]